24 May La relevancia de la agilidad en las empresas

Muchas veces solemos pensar que para lograr ser empresas innovadoras, mantener a los clientes y atraer nuevos prospectos, los departamentos de producción son los únicos que deben entregar los productos y servicios, así como resolver los problemas que se presentan cada vez más rápido; sin embargo, esta labor no es de un solo departamento en la empresa.

Cómo lograr una ventaja competitiva en un entorno cambiante

Cuando las organizaciones creen y confían en que adquiriendo soluciones en la nube y exigiendo a los departamentos de sistemas que incrementen su velocidad y calidad de las soluciones tecnológicas, van a resolver sus necesidades de innovación, solamente están atendiendo una parte que, si bien es necesaria, no ayudará completamente a mantener las ventajas competitivas en un entorno cada vez más exigente.

“Para lograr un cambio que permee y se mantenga en el tiempo, la empresa debe formular desde su estrategia las oportunidades, iniciativas e inversiones en las cuales desea trabajar a partir de la detección de necesidades del mercado”

Lograr la entrega de valor en el menor tiempo de espera posible, pero se requiere que las organizaciones revisen sus estructuras, procesos y cultura para asegurar que están formuladas para la innovación, la velocidad y la agilidad.

Ahora bien, al principio mencionamos que un error común es pensar que solamente un área es la que debe cambiar, sin embargo, la mayoría de las actividades de la empresa están conectadas entre sí para entregar los productos y/o servicios al cliente: desde que la persona hace una compra, la empresa recibe la solicitud, genera el pago, prepara el producto o servicio a entregar, lo entrega y finalmente cierra el ciclo de la venta, participan departamentos de compras, finanzas, producción, logística, ventas, calidad, etc.

“Debemos asegurar que el flujo de valor sea eficiente y que se trabaje de manera colaborativa entre todas las áreas”

Al tener una eficiente colaboración entre las áreas se evitarán cuellos de botella y se tendrán claras las funciones y responsabilidades entre cada área. Visualizar la forma en que hoy se trabaja ayudará a identificar aquello que la organización debe mejorar para resolver —a tiempo— las necesidades de los clientes, en muchos de los casos, incluso puede ser necesario reorganizar la estructura organizacional.

La alta dirección de las organizaciones juega un papel muy importante y tiene la responsabilidad de permear una cultura de colaboración, aprendizaje y experimentación. Apoyarse de metodologías, herramientas y sobre todo de agentes de cambio ayudará a permear hacia toda la organización una nueva forma de pensamiento, necesaria para lograr la agilidad en toda la organización y mantener entonces, su ventaja competitiva.

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